Marineros consiguieron un arreglo para la flota del langostino

Sitio de Internet – El Guardián – Mar del Plata

Ya podrían salir a pescar los 11 buques tangoneros que, desde varios meses, se encontraban paralizados por un conflicto sindical.

La preocupación de un sector de la pesca de Mar del Plata empieza a disiparse. Porque en las últimas horas pudo destrabarse el conflicto que sufría la flota tangonera, especializada en la pesca del langostino.

Ayer, los dos sindicatos que agrupan a los marineros en el puerto local, SOMU y SIMAPE, consiguieron una recomposición de los salarios del 2020.

Ese arreglo permitirá que se les pague a los trabajadores 350 pesos por cada tonelada de langostino procesada el año pasado. Esto había quedado truncado por la aplicación de un convenio que no era reconocido en el puerto marplatense.

De esta forma, el margen de recuperación será cercano al 80% y se pagará en tres plazos, por lo que cada trabajador recibiría una compensación aproximada en 250.000 pesos.

Pero eso no es lo único que consiguieron los dos sindicatos: un aumento del 33% para los sueldos del 2021 termina de coronar el escenario actual en un sector que tiene mucho por hacer, en un contexto donde el langostino puede ser el salvavidas oportuno para la industria.

Por como cerró el acuerdo, los 11 buques que no había podido salir a pescar en los últimos meses estarían en condiciones de hacerlo. Al menos al destrabarse el conflicto con los sindicatos.

Cómo se forma el precio del pescado

Sitio de Internet – Ahora Mar del Plata

La cadena de valor del pescado depende de diferentes factores. El trabajo que se desarrolla en el mar, el paso por las plantas de procesamiento, la oferta por parte de las pescaderías y la demanda de los consumidores confluyen en el precio final de un alimento que, para los distintos actores de la cadena, tiene un valor «aceptable».

El clima y la temperatura del agua también influyen en el precio. «Ahora está complicado el tema de la merluza, porque el agua está muy caliente y cuando los barcos sacan la merluza, si está fea se descarta el pescado y eso hace que el valor suba», explicaron desde una de las pescaderías consultadas por Telediario, el noticiero de Canal Diez.

«Depende también de lo que traen los barcos. Uno trata de mantener los precios, porque suele ir variando. En la banquina es todo muy fresco y el precio muchas veces lo establece el barco. Tiene una suba pero es menor», indicaron.

«El pescado se descarga todos los días. El precio se trata de mantener, no varía mucho, tenemos el mismo precio que antes de Semana Santa», explicaron desde el mismo comercio.

Otra cuestión importante es el rendimiento que se obtendrá después de realizar los cortes. «Tenés la merluza que te rinde un 40%, otros pescados te rinden un poco más», explicaron desde otra de las pescaderías consultadas.

«Tenés algún pescado como el mero entero que tiene un precio en banquina. De ese kilo, sacás el 30% del filet para comer. De ahí sacás el precio. Si el mero lo pagaste 70 pesos en banquina, sabés que el kilo te va a costar 2.100 pesos. Le tenés que sumar un 70% porque eso es lo que tirás del pescado, no es que consumís todo. Tenés entre un 30 y un 50% de rinde en todos los filet», sostuvo el comerciante.

«Nosotros muchas veces compramos en el barco y procesamos nosotros y otras veces los compran las plantas y los vamos a buscar a las plantas, donde nos fijan el precio. Tiene ue ganar el dueño del barco, el dueño de la planta y nosotros con la pescadería», agregaron.

Mientras tanto, para los clientes el precio es razonable. «Yo compro filet de merluza, mejillón cocido. El pescado me parece barato», indicó un vecino a la salida de una de las pescaderías. «Está aceptable, el pescado que yo compré está a 350 pesos el kilo», agregó otro consumidor.

El Ministerio de Ambiente inspeccionó Centro de Tratamiento de residuos de la pesca de Madryn

Diario Jornada – Trelew

Los inspectores recorrieron todos los sectores de tratamiento, recepción de los solidos, planta de tratamiento de líquidos y lixiviados, además del área de acopio. También se analizaron las tareas de remediación de los sectores contaminados por las industrias pesqueras.

El Ministerio de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable de Chubut realizó en las últimas horas una visita al Centro de Tratamiento de Residuos de la pesca ubicado en Puerto Madryn, operado por la firma GP Inversiones.

Los inspectores de Ambiente recorrieron todos los sectores de tratamiento, recepción de sólidos, planta de tratamiento de líquidos y lixiviados, además de sectores de acopio de material estabilizado, inform la empresa a través de un comunicado de prensa.

Durante la inspección se constató que la empresa realiza todos los procedimientos de manera adecuada, acordes a las normas ambientales tanto provinciales y nacionales, no encontrando objeción en cuanto a las labores realizadas, se informó.

Se resaltó, además, la gestión ambiental por parte de la empresa, ya que muchos de los pasivos que aquejaban a los vecinos de Madryn ya no existen, aseguró la empresa. En el lugar se observa agua tratada, lagunas de tratamiento impermeabilizadas y residuos de langostinos en biopilas controladas.

Por otra parte, se controlaron las labores de remediación de sectores contaminados por las industrias pesqueras, encontrándose un 70% ya remediado y saneado.

La situación en esta empresa de Madryn contrasta con lo que ocurre con los residuos de la pesca en Rawson, que por ahora sigue sin una solución debido a que hace pocas semanas fue clausurada por la Justicia –ya ocurrió varias veces- el lugar de enterramiento de residuos pesqueros que se ubica dentro del ejido de la capital provincial pero detrás del Autòdromo “Mar y Valle”, a pocos kilómetros de Trelew.

En el lugar se volvieron a encontrar cavas con residuos pesqueros enterrados y lixiviados aflorando de las mismos, algo que está prohibido por la ley.

En busca del calamar: Éxodo masivo de poteros hacia el paralelo 52

Sitio de Internet – Mar y pesca noticias patagónicas

Una veintena de buques poteros que operan de manera selectiva sobre el calamar comenzaron a navegar hacia el paralelo 52º en busca del cefalópodo. Hay fuertes sospechas de que en la zona podría hallarse una mancha grande del stock sudpatagónico.

«La verdad es que la pesca entró en el tramo final y al norte ya no se estaba pescando nada, muchos buques decidieron volver a puerto y dar por terminada la temporada, pero hace unos días se filtró un dato de que al sur estaría habiendo calamar, así que hasta allí está yendo gran parte de la flota”, señaló a Mar&Pesca una fuente local vinculada con la actividad para luego acotar que, “en un par de días sabremos si realmente hay pescado en esa zona”.

De todos modos, la fuente recalcó que la pesca en el norte estaba resultando “muy errática con capturas escasas, prácticamente no estábamos haciendo nada”, remarcó.

“Se pescó muy bien mientras el calamar duró; hubo mucho pescado al inicio y ahora ya se cortó, de hecho, las estadísticas de descargas son muy buenas, en Deseado la estiba trabajó muy bien, y ojalá que este dato sea cierto porque Deseado es el puerto con mayor infraestructura mas conveniente para que ingresen los poteros”, aseguró.

 Sin fauna acompañante

Por si algún funcionario o funcionaria que no tiene conocimientos sobre la actividad, espera que los poteros traigan “toda la fauna acompañante” a puerto, conviene aclarar que, estas embarcaciones pescan de manera selectiva utilizando máquinas automáticas llamadas poteras o jiggins, diseñadas sobre la base del comportamiento del calamar que reducen a cero el by catch. Para una mayor explicación reproducimos un video de Pescare.com.ar donde puede verse un buque potero en plena acción. Gentileza foto portada: buque Navegantes III por José Luis Strano).

Probarán el funcionamiento de cámaras a bordo de buques pesqueros

Diario El Chubut – Comodoro Rivadavia

Mediante una disposición la Subsecretaría de Pesca estableció un período de prueba de dos años para poner en funcionamiento un sistema integral de control a través de cámaras de video a bordo de buques de la flota pesquera. Ya lo habían intentado sin éxito una década atrás.

La Subsecretaría de Pesca vuelve a la carga con el control de la flota a través de cámaras de video. Mediante la Disposición 52/2021, que firma Carlos Liberman, quedó establecido un período de implementación y prueba de dos años a fin de poner en funcionamiento el Sistema de Cámaras a bordo de Buques Pesqueros.

En este lapso la Dirección Nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera “probará y pondrá en funcionamiento un Sistema Integral de Control que resulte superador al “Sistema de Control a través de las Cámaras de Video a Bordo de los Buques de la Flota Pesquera”, según queda establecido en el artículo primero de la norma que fue publicada en el Boletín Oficial.

La Dirección a cargo de Julián Suárez tendrá la potestad de dictar todas las normas y actos administrativos que resulten necesarios para llevar adelante las pruebas y la puesta en función del sistema referido en el artículo primero, detalla Revista Puerto. 

En este nuevo intento queda establecido que las firmas armadoras de buques pesqueros tendrán a su cargo los gastos que demande el mantenimiento de los equipos instalados y/o a instalarse. Por último, la nueva disposición también suspende la vigencia de las Disposiciones 206/2010, 1/2011 y 86/2013, todas de la Subsecretaría de Pesca, hasta tanto la mencionada Dirección Nacional “culmine el procedimiento de implementación y prueba y en función del Artículo 2° de la presente, dicte las normas y/o los actos administrativos que determinen la conveniencia de rehabilitar la vigencia de las mismas o bien su sustitución por un sistema superador del previsto en ellas”.

Menna denunció que la Base Zar «no cuenta con un solo avión para patrullaje marítimo»

Diario El Chubut – Comodoro Rivadavia

El diputado nacional Gustavo Menna presentó en el Congreso un pedido de informes al Gobierno para que explique por qué los aviones de la Base «Almirante Zar» de Trelew están fuera de servicio, lo cual complica la situación de la pesca ilegal en la Zona Económica Exclusiva. El legislador por Chubut pidió conocer por qué el patrullaje se realiza desde Punta Indio, en Provincia de Buenos Aires, y no desde las bases aeronavales ubicadas en la Patagonia, más cerca de los lugares en los que se registra la pesca ilegal.

En el mismo proyecto de Resolución, Menna solicitó a la Jefatura de Gabinete de Ministros que informe los motivos por los cuales uno de los aviones de la Base Zar está en reparación desde hace 6 años, pese a que para ello en 2015, en la gestión de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, se firmó un contrato por sumas millonarias con la empresa portuguesa OGMA. El avión, uno de los tres Orion con asiento en la Base Zar, aún permanece en la fábrica argentina de Aviones Brigadier San Martín (FADEA).

CASI 400 BUQUES SIN PERMISOS

El pedido de informes que Menna presentó por el estado de los aviones de la Base Zar, está vinculado a la preocupación que el legislador planteó a principios de este mes, a través de un proyecto por el cual pidió que el Estado Nacional utilice «todos los medios disponibles» para disuadir la pesca ilegal en la Zona Económica Exclusiva, ante la presencia de casi 400 buques extranjeros sin permisos de pesca a la altura del Golfo San Jorge.

La pesca ilegal, dijo Menna en el pedido de informes sobre los aviones de la Base Zar, «lesiona la soberanía argentina y además perjudica el caladero por la pesca descontrolada y predatoria que llevan a cabo».

Dijo que «resulta inexplicable que no se dispongan de los medios de patrullaje aéreo necesarios» para el contralor.

En el caso de la Base Almirante Zar de Trelew, indicó, «de las 6 aeronaves Orion P3-B cuatrimotores turbo hélice con gran capacidad de desplazamiento y la autonomía necesaria para llegar a la Milla 200 y hacer sobrevuelos de varias horas en la zona que se incorporaron hacia fines de los ’90 no queda ninguna aeronave operativa».

Esos aviones habían sido incorporados «en reemplazo de los Electra en la dotación de la Escuadrilla de Exploración dependiente de la Escuadra Aeronaval 6, que depende a su vez de la Fuerza Aeronaval 3 de la Armada Argentina destacada en la Base Zar».

SIN AVIONES

«Es decir -enfatizó Menna- la Base Almirante Zar no cuenta con un solo avión que lleve a cabo tareas de patrullaje marítimo, detecte buques pescando ilegalmente, obtenga las pruebas fotográficas del caso y dé aviso a los medios navales para su persecución y captura».

«Esos aviones fueron dejados fuera de servicio por vencimiento de sus fuselajes y al día de la fecha solo quedan tres en condición de ser reparados», remarcó.

Observó que «el resto de las bases aeronavales situadas en la Patagonia tampoco tienen aviones operativos y el control se realiza con aviones de menor porte, bimotores, de poca autonomía, que solo pueden llegar a la zona de la Milla 200 pero que deben inmediatamente regresar a sus bases por esa insuficiencia».

«Esos aviones están destacados en la Base Punta Indio, en la Provincia de Buenos Aires. Si bien toman las bases de la Patagonia para sus funciones, es inexplicable que estas últimas bases, que están más próximas de la zona a patrullar, no cuenten con medios aéreos», observó.

Langostino: crece el número de congeladores que se suman a la pesca

Sitio de Internet – Mar y pesca noticias patagónicas

Un total de 57 buques en su mayoría congeladores, son los que operan al norte del paralelo 42 en la franja ubicada fuera de la veda permanente de juveniles de merluza.

Mientras siguen trabadas las negociaciones entre las empresas de Mar del Plata nucleadas en CEPA y los gremios SIMAPE y SOMU, ayer en la tercera jornada de operaciones los buques continuaban con buenas y escasa fauna acompañante, según detallaron a Mar&Pesca fuentes del sector.

SOMU y SIMAPE llegan a un acuerdo con empresas marplatenses

Sitio de Internet – Mar y pesca noticias patagónicas

Los gremios mantenian una disputa con las empresas Solimeno, Moscuzza y Xeitosiño

Hace unas horas se pudo conocer que luego un mes de conflicto, se llegó a un acuerdo por la flota tangonera de las empresas Moscuzza, Solimeno y Xeitosiño con los gremios del SOMU y del SIMAPE.

El problema surgió debido a salarios mal liquidados de la temporada pasada en torno al convenio vigente para la flota congeladora. Es por ello que no accedían a firmar la propuesta de 2021.

En el reciente acuerdo plantearon lo siguiente:

Se reconocerá el pago de la cantidad de pesos $350 por tonelada, el cual será no remunerativo. Dicha diferencia será tomada para los casos de enfermedad inculpable y accidentes.

Los pagos serán en 3 partes: un 25% al arranque de temporada, el 50% al ingreso de los barcos y el 25% restante al realizar la segunda salida.

“Lo que se ha logrado en esta lucha es demostrar que nadie es impune y puede cambiar de forma unilateral los convenios colectivos de trabajo” expresaron desde el SOMU, seccional Mar del Plata.

También indicaron que antes de llegar al acuerdo, se les consultó a los afiliados presentes que se encontraban afectados por esta problemática, los cuales estuvieron de acuerdo por unanimidad en el acuerdo mencionado.

Este conflicto mantenía paralizado a once buques tangoneros congeladores de estas empresas. Esto representaba una pérdida de producción de más de 200 toneladas de langostino por día, equivalentes a 93 millones de pesos diarios.

Argentina volvió a exportar langostinos a Brasil y una firma local certificó el primer embarque

Diario La Capital de Mar del Plata

Tras ocho años de negociaciones se volvió a abrir el mercado para esta producción marina. El cargamento que viajó desde Mar del Plata al país vecino fue de más de 23 toneladas.

Luego de 8 años, Argentina volvió a exportar langostinos a Brasil y una firma local fue la que certificó el primer embarque, el cual incluyó más de 23 toneladas de este producto marino.

La noticia fue confirmada por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), desde donde se destacó el trabajo coordinado realizado por los gobiernos de ambos países para volver a abrir este mercado.

Buena Proa fue la firma local que certificó el cargamento enviado desde Mar del Plata a Brasil y que estuvo compuesto por 1231 cajas de cola de langostino congelado, 14 de langostino entero congelado y 84 de langostino pelado devenado con un peso neto total de 23.306 kilogramos.

En este marco, el ministro de Agricultura Luis Basterra, acompañado por el secretario de Agricultura, Jorge Solmi, la jefa de Gabinete, Diana Guillen, y el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Carlos Liberman, recibieron a Mariano Retrivi y Julieta Martínez, directores de Buena Proa.

El ministro consideró “muy importantes los avances en la agenda bilateral de apertura de mercados e intercambio bilateral entre ambos países, que incluye el acuerdo para la comercialización de langostinos, uno de los temas históricos que nos propusimos a comienzos del 2020”.

“Ambos países enfrentamos el desafío de continuar consolidando a la región como un proveedor al mundo de alimentos confiables, seguros e inocuos, fortaleciendo la lucha en favor de la seguridad alimentaria”, manifestó Basterra tras el encuentro.

Cabe recordar que el embajador en Brasil, Daniel Scioli, había anunciado el pasado martes 2 de marzo que Argentina volvería a exportar langostinos a Brasil, luego de que la Justicia de ese país decidiera levantar la medida cautelar que suspendía el comercio bilateral de estos productos desde 2013.

“Tras las gestiones realizadas por la Embajada que dirijo, el Supremo Tribunal Federal de Brasil vuelve a autorizar la importación de langostinos argentinos. Las mismas estaban suspendidas desde 2013, por una medida cautelar”, celebró Scioli tras el anuncio.

En aquella oportunidad, el embajador adelantó también que “la exportación de langostinos representa un volumen exportable de 50 millones de dólares anuales, especialmente para las provincias de Chubut y Buenos Aires“.

Tras aquel anuncio, la industria pesquera elogió las gestiones y así se lo hicieron saber a Scioli la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de Argentina (Capeca), la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (Capip), el Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (CEPA), y la Cámara de Armadores de Poteros Argentinos (CAPA) en una reunión virtual celebrada el 11 de marzo.

La reapertura del mercado de langostinos había sido formalizada el mes pasado en la ciudad de Brasilia, donde el ministro Basterra su par brasileña, Tereza Cristina Corrêa da Costa Dias, y el embajador Scioli remarcaron el objetivo de “reforzar los vínculos de amistad, comercio, cooperación y coordinación bilateral”.

La certificación del primer embarque de Mar del Plata a Brasil se realizó el viernes en Vepez, estación 419 en la ciudad, y los barcos proveedores fueron “Ángel Apóstol” y “Don Santiago”. En tanto que la Aduana de salida y entrada fue Paso de Los Libres – Corrientes/Uruguayana – Brasil.

Tras concretarse la primera exportación tras ocho años, el director de Buena Proa, Mariano Retrivi, resaltó que: “el mercado de Brasil para los productos derivados del langostino es muy importante porque tienen una cultura de grandísimo consumo de pescado”.

“Apenas nos enteramos de las gestiones que estaba haciendo el Ministerio y la Embajada, que veníamos siguiendo muy de cerca, y desde el momento en que se anunció de la reapertura, contactamos a los clientes, trabajamos rápidamente y pudimos certificar nuestro primer embarque”, concluyó.

“Un pasaje a la baja de CAPECA, que terminó siendo carísimo”

Sitio de Internet – Puerto de Palos – Mar de Plata

 Roberto Garrone

Mariano Pérez fue el artífice de venderles a los lobistas de CEPA que abandonen ese convenio y se pasen al de los congeladores patagónicos para pagar menos salarios en los tangoneros. El SIMAPE se hizo fuerte, el SOMU se coló y los armadores terminaron perdieron plata y, sobre todo, días de pesca.

Una vez que pase la virulencia maratónica de las últimas horas. Transitadas entre reuniones virtuales y cuartos intermedios, llamadas, mensajes y propuestas con la urgencia por destrabar el conflicto que atravesaban las empresas Moscuzza, Solimeno y Xeitosiño y devolver sus tangoneros congeladores al agua, una vez que se calme este mini temporal, los patrones tendrán que sentarse y sacar cuentas de todo lo perdido y preguntarse si valió la pena.

A simple vista no parece haber sido una buena decisión de los asesores legales de dichas empresas aprovechar la firma del dólar lastrado para la producción que había suscripto el SOMU con CAPECA y CaPIP para, unilateralmente, meterse por la ventana en ese convenio y abandonar el que CEPA, su cámara, los unía con los marineros de SOMU y SIMAPE.

Sobre todo porque las mareas al norte de la veda de merluza ya las habían liquidado bajo el convenio de CEPA unos meses antes. Darío Sócrate, Lisandro Bellarmini y Ottito Wöhler compraron el pasaje a CAPECA que les vendió Mariano Përez. El directivo de Iberconsa es el padre de la criatura de este engendro.

Los otros tres hicieron caso. Mariano sonaba convincente. Aseguraba tener el guiño de Liberman para la maniobra que les ahorraría millones y millones de pesos por salarios más bajos. Los otros creyeron en su palabra, jugaron a fondo esa carta y convencieron a sus patrones de la conveniencia se saltar al charco convencional más conveniente. Con la realidad consumada todos estos lobistas están en el ojo de la tormenta.

Todos los barcos están pescando menos los de ellos. Eso resulta inadmisible para “Pototo” y “Tony”, dos abuelos cuya voracidad es irrefrenable. Se sienten estafados, anclados en el muelle. Tan apurados están por sacar los barcos que ya tienen a todos los tripulantes aislados y testeados. Casi todos porque hubo un positivo en las últimas horas en el Rasmus Effersoe que complica los planes de salida.

Los daños de esta estrategia equivocada fueron reconocidos por las propias empresas, que el domingo contabilizaron pérdidas por 93 millones de pesos por día con los barcos amarrados en muelle. Pero ya estaban en medio del rio y con los gremios sublevados.

La avivada del pasaje a CAPECA resultó carísima. Los días sin pescar, el fortalecimiento del SIMAPE cuando la idea era aislarlo y someterlo y la plata adicional que hay que pagar, Es difícil hacer un promedio porque hay barcos con más personal que otros, barcos más grandes que otros y no todos pescaron lo mismo, pero el costo extra salarial ronda los 4,5 millones de pesos por barco.

El pase maestro diseñado por Pérez y comprado por los otros tenía ese doble propósito, no solo pagar menos de lo que marcaba el convenio CEPA/SOMU. También meter en la bolsa de la baja de salarios al SIMAPE, perjudicar a sus marineros y aislar a Pablo Trueba.

Pero SIMAPE tenía un convenio vigente con CEPA al momento en que la patronal lo borró con el codo. Por eso se plantaron desde que llegó la primera liquidación salarial.  Y esperaron el vuelto con paciencia oriental. Hasta que las empresas que cultivaban la indiferencia a los planteos del sindicato tuvieran interés en volver a pescar. Y ahí decretaron el paro para recomponer los salarios mutilados por el pasaje mágico de Mariano.

CEPA pudo, el año pasado, convocar al SIMAPE a negociar la baja en el valor de la producción de langostino que firmó SOMU pero nunca lo hizo. Tal vez conscientes que la presión hubiese sido otra y era mejor negociar con un gremio y no con dos.

Para las empresas, o al menos en el pensamientos de sus asesores legales, el SIMAPE estaba en una posición de debilidad.  Su porción minoritaria en la torta de afiliados que tiene en la flota tangonera congeladora en Mar del Plata constituían un problema fácil de arreglar. Otro pálpito que no coincidió con la realidad.

Es cierto que el SOMU se había comprometido ante CEPA a firmarle las mismas condiciones a la baja pero no lo hizo. Y el abrazo repentino al convenio de CAPECA dinamitó cualquier chance de hacerlo el año pasado.

Recién el mes pasado el Ministerio de Trabajo terminó de hacer entrar al CEPA en el acuerdo a la baja firmado por las cámaras patagónicas luego de rechazar la impugnación que presentó el SOMU. El logro no salió barato:  la patronal tangonera congeladora tuvo que sacrificarse en bloque solidario y se bajó de la prospección al norte.

Después CAPIP y CAPECA, donde es socia la Iberconsa que emplea a Mariano Pérez, se corrieron, se abrió la zona de pesca y se terminó la solidaridad. Las únicas que quedaron amarrados fueron los 11 barcos de las empresas de CEPA que habían comprado el pasaje de Mariano. Ya las risas cómplices en el grupo de whatsapp se habían terminado.

Hoy el SOMU no tiene razones para reclamar nada, más allá de la queja por el cambio arbitrario de convenio. Los 350 pesos por tonelada es un tercer aguinaldo para los afiliados al gremio. El conflicto se circunscribe a la Delegación Mar del Plata donde pelean para que las empresas mantengan su adhesión al convenio de CEPA. En el fondo esa siempre fue la pelea de la seccional local para que tampoco los devore el centralismo porteño.

Claro que esto a su vez genera una grieta con los marineros del sur y con la cúpula nacional, que no quieren que haya marineros que ganen más que otros por hacer el mismo trabajo. El miedo a la desafiliación masiva de los marineros del SOMU ante un fracaso en el litigio en Mar del Plata obligó a la conducción nacional a caminar sobre cáscaras de huevo en esta historia.

Por eso desde la patronal también sobrevuelan los fantasmas de las traiciones de las cúpulas sindicales de ambos sindicatos. A Durdos y Navarro le reprochan los acuerdos de palabra que nunca se rubricaron en un papel. Ni la firma del año pasado ni la no impugnación de la homologación. Presionado por Mar del Plata el SOMU la impugnó y mantuvo vigente el conflicto un par de semanas más.

Para Trueba también por estas horas hay insultos en cuatro idiomas entre los empresarios y sus lobistas. Al Secretario General del SIMAPE le reprochan la férrea defensa de sus afiliados. Alguno hizo circular una foto vieja, en que se ve al referente del SIMAPE sentado en la mesa de la Fundación Pensar y vislumbran que su oposición al arreglo no solo busca esmerilar a Liberman sino que es la antesala del lanzamiento al ruedo político

Sinceramente no asoma Trueba con un perfil ni parecido a Novero ni creo que tenga apetencias de candidato. También creo que el “Gato” jamás se hubiese sentado en una mesa con macristas, aunque tuviese la necesidad de recomponer la situación de embarcados y observadores en el INIDEP y detener la sangría entre los inspectores de tierra, áreas claves en la estructura del gremio. Pero de ahí a pensar en un Trueba candidato, es jugar mucho con la imaginación.

Mariano ya no predica recetas mágicas y los ilustres letrados buscan chivos expiatorios para justificar sus pronósticos fallidos. El pasaje a CAPECA resultó un fiasco absoluto pero los que perdieron mucha plata fueron sus patrones.