Sitio de Internet – Pesca Chubut – Chubut
Huella de carbono pesca. En un mundo donde la sostenibilidad ya no es una opción, sino una exigencia, las industrias se ven empujadas a repensar sus prácticas productivas. En ese escenario global, la pesca patagónica, un eslabón clave en la economía regional, comienza a escribir un nuevo capítulo. Food Partners Patagonia S.A., una empresa dedicada a la captura, procesamiento y comercialización de langostinos salvajes y centolla, se convirtió en la primera compañía pesquera de la región en medir su huella de carbono, un hito que sienta precedentes en el camino hacia la competitividad y el compromiso ambiental.
El proyecto es parte del Programa de Competitividad que la empresa puso en marcha junto a la consultora MIZ & Asociados. Esta iniciativa tiene como pilares cuatro áreas fundamentales: la medición y reducción de la huella de carbono, la eficiencia energética, la transición hacia energías renovables y la sustentabilidad de la materia prima. Un desafío tan ambicioso como necesario para una actividad con múltiples actores y una cadena de valor compleja.
En colaboración con la firma KOLIBRI, Food Partners inició la semana pasada la medición integral de su impacto ambiental. La metodología adoptada es el GHG Protocol, que abarca los alcances 1, 2 y 3. Esto significa que el análisis incluirá no solo las operaciones directas de la empresa, como la pesca y el procesamiento, sino también las emisiones indirectas generadas a lo largo de toda la cadena de valor. La evaluación se desarrollará durante seis meses y culminará con la identificación de las principales fuentes de impacto y la definición de objetivos concretos de reducción y mitigación, con el fin de construir una estrategia de negocios de bajo carbono.
La energía, sin duda uno de los principales costos operativos en la industria pesquera, también está en el foco del programa. PROCAST, la firma encargada de esta etapa, ya comenzó con una evaluación preliminar de eficiencia energética en las plantas de Food Partners, ubicadas en Rawson y Puerto Madryn, en la provincia del Chubut. El trabajo consistirá en relevar y analizar infraestructura, equipamientos, procesos productivos y facturación energética, con el objetivo de identificar oportunidades para optimizar el consumo eléctrico. La implementación de las recomendaciones permitirá no solo reducir costos, sino también minimizar el impacto ambiental.
“La naturaleza nos permite crear valor para todos, por lo tanto, para que lo que hacemos siga siendo natural y amigable con el ambiente, alineamos nuestros proyectos y objetivos con este Faro en el horizonte”, sostuvo la compañía en su anuncio. La frase no es casual: Food Partners Patagonia avanza hacia una nueva visión de la pesca industrial, donde la rentabilidad y el respeto por el ambiente pueden, y deben, convivir.
El compromiso con la medición de la huella de carbono coloca a la empresa en la vanguardia de un cambio necesario y exigido en los mercados globales. Cada vez más, consumidores y organismos internacionales demandan trazabilidad, transparencia y estrategias concretas de mitigación ambiental a las empresas exportadoras. La adopción de prácticas sostenibles no solo mejora la imagen de la industria argentina en el mundo, sino que también fortalece su competitividad frente a países con mayores estándares ambientales.
Food Partners Patagonia S.A. no solo inaugura un proceso que se convertirá en un modelo para otras empresas pesqueras, sino que además responde con determinación a las demandas actuales del mercado internacional y del planeta. La medición de la huella de carbono, el uso eficiente de la energía y la búsqueda de una pesca sustentable marcan el camino de un sector que debe transformarse para garantizar su futuro.