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El teniente de Navío, Fernando Falcón, jefe del Apostadero Naval de Puerto Deseado, detalló que, junto a personal especializado en balizas y faros, realizó una recorrida por la ría local para evaluar el estado de la baliza Magallanes, que se desplomó debido a las fuertes ráfagas de viento y actualmente se encuentra sumergida.
Falcón informó que el reemplazo de la baliza luminosa podría demorar entre uno y dos meses. “Este es un hecho muy reciente, por lo que debemos coordinar con el personal de la provincia y con el Servicio de Hidrografía Naval, quien es responsable de las balizas y los faros. Dependiendo de los recursos disponibles se iniciará el proceso de reemplazo”, explicó.
El jefe del Apostadero destacó que, aunque el Servicio de Hidrografía Naval proporcionará los materiales necesarios, será la Armada quien llevará a cabo la instalación, ya que en la base cuentan con personal altamente especializado para este tipo de tareas.
“Dado que la baliza está ubicada en el centro de la ría, las condiciones climáticas, especialmente los vientos, complican la instalación. Sin embargo, seguimos adelante con el trabajo”, comentó Falcón, quien también subrayó que la ría cuenta con cinco balizas en total, todas en funcionamiento, pero que requieren mantenimiento continuo.
“De todas las balizas, la más significativa es la Magallanes, ubicada en la Roca del Diablo. Esta baliza señala la peligrosa roca en la que, en 1887, se hundió el vapor Magallanes”, concluyó el teniente.