De impugnaciones y ¿multas a tangoneros congeladores?

Sitio de Internet – Puerto de Palos – Mar del Plata

by Roberto Garrone  

Sigue la novela de las imputaciones a los barcos fresqueros de altura por la zafra de langostino 2021. El “Pioneros” y “Ciudad Feliz” siguen parados. El barco de Iaccono impugnó y la Subsecretaría de Pesca debía pronunciarse sobre la validez de las actuaciones. Dicen que hay 10 factoría infraccionados pero en las cámaras empresarias no saben nada

Lejos de apaciguarse las aguas tras la tormenta que desataron las imputaciones generadas desde la Dirección Nacional de Control y Fiscalización Pesquera a la flota que operó sobre el langostino en la zafra pasada en aguas nacionales, se atraviesan horas claves en que la autoridad de aplicación debe, o debería, definir la suerte del programa “multas para todos”

Al cierre de esta columna no se sabía con certeza la suerte del “Ciudad Feliz”, el único barco cuyo armador primero recibió la orden de interrumpir la marea y regresar a puerto y luego se enteró del por qué. Y a los días recién pudo notificarse y conocer los detalles. Total normalidad.

La empresa armadora no se allanó para reducir la pena y sanción económica y el barco sigue parado en el muelle con los tripulantes a la espera de novedades. Los laburantes presos de la inactividad pagan las consecuencias de la discrecionalidad. El ejemplo más tangible de la excesiva severidad que contempla la Resolución 171/2018 y sus 30 días de suspensión preventiva.

Ese es uno de los puntos objetados por la defensa del “Ciudad Feliz”. Al repasar la Resolución creen que la suspensión preventiva no es decisión obligatoria que debe adoptar el Director Nacional sino una alternativa opcional.

La defensa hace mención en su descargo a la Disposición 111/2004 que reglamenta el artículo 56 de la Ley 25470 donde la Nación queda facultado para infraccionar irregularidades que se cometan en aguas provinciales.

Fundamentalmente las que registra el Mompesat y a la pesca de un volumen mayor al asignado en el cupo. Lo que ocurre con muchos barcos de la flota de Rawson que suman lo pescado en provincia y Nación, sin ninguna intervención de la Subsecretaría desde que Bosch paró parte de la flota en el 2018.

Los argumentos del descargo del “Ciudad Feliz” quedaron expuestos en la impugnación mediante un recurso administrativo a la Subsecretaría de Pesca cuyo plazo para responder, 5 días hábiles, vencieron el pasado martes.

Liberman tiene dos alternativas de procedimiento: avalar lo hecho hasta aquí por Julián Suárez, incluso los días de suspensión que lleva el “Gurises” por extender las 72 horas del límite de marea a pesar de navegar remolcando a puerto al “Don Raimundo”, o que desde la Dirección Nacional desestimen las actuaciones y el Subsecretario no tenga que pronunciarse para convalidar las sanciones.

Esto último también asoma como una opción que podría abrir nuevos frentes de conflicto. Es que muchos infraccionados se allanaron y pagaron cifras millonarias o se adhirieron a un plan de cuotas y en algún momento debieran cumplir el período de suspensión, reducido, pero que implica una inactividad al fin.

Una alternativa intermedia que nadie descartaba era un escrito desde la Dirección Nacional al Consejo Federal Pesquero para que se avance en la elaboración de una nueva normativa para regular el funcionamiento de la flota fresquera y congeladora sobre la pesquería de langostino.

Todas las alternativas son posibles y probables, aunque lo que amalgama a administradores y administrados es que la Resolución 171 es un texto mal escrito que debe actualizarse. Pero si para colmo quien debe aplicarla muestra que el sentido común es el menos común de los sentidos, llegamos a este escenario donde todos creen tener razón en reclamar, objetar e impugnar.

En la Dirección Nacional reina el silencio. Parecen no querer seguir volcando leña al fuego con detalles de nuevas imputaciones, si es que las hubo en este tiempo que pasó desde que se hizo público lo de las sanciones a partir de la queja de los armadores, la suspensión y posterior salida del “Marbella”, el regreso a puerto del “Ciudad Feliz”, la renuncia de Mariano Retrivi a la presidencia de ALFA y la grieta indisimulable entre esta Asociación y la Cámara de Armadores.

Una certeza entre tantas dudas. Finalmente la asamblea de socios revistió de legalidad el rumor que corrió tras el paso al costado de Retrivi y Juan Taranto es el nuevo presidente de ALFA. Será un rol meramente institucional y seguramente de menor exposición que su antecesor ya que las relaciones públicas no son precisamente el fuerte del nuevo Presidente.

En Mar del Plata a muchos les hace ruido la discrecionalidad con que se han aplicado las sanciones. Por motivo similar, superar las 72 horas de marea o suponer que el buque estaba pescando de noche, hay imputaciones por 20 mil UP, por 40 mil UP y por 80 mil UP.

Con qué criterio unos reciben 20 mil UP y otro cuatro veces más, tampoco está claro. La unidad de pesca tiene el valor de un litro de gas oil y se aplican desde que se modificó la Ley Federal de Pesca y se actualizaron e incrementaron las sanciones en octubre del 2020, justamente para que no pierdan valor en un país donde su moneda se devaluó solo el año pasado un 50,9%.  Por estas horas algunos buscan la reglamentación de esa modificación de la Ley para constatar su validez.

En Pesca aseguran que también se infraccionaron 10 barcos tangoneros congeladores por el desempeño en la zafra 2021, como para sumar elementos que desalienten el ánimo persecutorio que creen que anidan en Mar del Plata. No se saben más detalles; solo que no tiene que ver con los mismos motivos que imputaron a la flota fresquera, sino por  superar el límite del 30% de reproceso de langostino a bordo.

Acá no trascendieron nombres de barcos, ni de empresas, mucho menos de montos de las sanciones aplicadas como sí ocurrió en el caso de los fresqueros de Chubut y Mar del Plata.

Claro que algunos dudan de la existencia de esas infracciones. Es que a juzgar por las respuestas que brindaron algunos representantes de la flota tangonera congeladora, las imputaciones brillan por su ausencia. Puede pasar que todavía no hayan sido notificadas, cosa rara, o que los armadores eligieran el silencio, aceptar la infracción y allanarse.

Lo cierto es que ninguno de sus representados, en Patagonia ni en Mar del Plata, estaban al tanto del asunto. ¿Las multas son ciertas o un argumento ficticio para hacer creer al resto de los administrados que el reparto de imputaciones fue parejo para todos?

Suponiendo que sean ciertas, es de esperar que todos cumplan los días de suspensión cuando se abra la posibilidad de ir a pescar langostino al norte del área de veda de merluza, ya como especie objetivo. Pero como no es una opción elegida por toda la flota, costará saber quién está suspendido y quién amarrado por voluntad propia.