Exportaciones en verde pese al freno chino y la merma del calamar

Sitio de Internet – Puerto de Palos – Mar del Plata

by Roberto Garrone

Entre enero y julio las ventas pesqueras al exterior crecieron un 15% en relación al mismo período del año pasado. Pero China compró casi 3 veces menos en volumen y generó muchas menos divisas. Más de la mitad de los dólares que genera la pesca corresponden al langostino patagónico. 

Las exportaciones pesqueras argentinas en los primeros siete meses del año superaron los mil millones de dólares, un 11% más que las divisas generadas el año pasado pese a una pequeña reducción del volumen y el colosal freno de las compras de China en los principales productos como calamar y langostino entero.

El informe que resume las ventas discriminadas por especie y destino que aporta CAPECA marca para el período enero-julio el envío de 278.760 toneladas de productos pesqueros por los que ingresaron 1.043 millones de dólares. El año pasado para el mismo lapso de tiempo fueron 286.222 toneladas y 934,7 millones de dólares.

Así como el año pasado la aguja del amperímetro del negocio pesquero lo marcó el calamar, en este 2021 fue reemplazado por el langostino patagónico. Entre el entero y el excepto entero, las colas en sus diversas presentaciones, sumaron 76746 toneladas que generaron 534,6 millones de dólares.

Más de la mitad de las exportaciones de la pesca nacional corresponden al marisco patagónico. Por si hacía falta sumar un elemento más que revele su trascendencia y exponga la necesidad imperiosa de protegerlo. De generar las condiciones y consensos necesarios que permitan patinar a la pesquería de un manejo sustentable.

Con la flota tangonera congeladora operando en la pesquería con los porotos arreglados con el SOMU, las exportaciones de langostino entero pasaron de 17.429 toneladas en los primeros 7 meses del año pasado a 41.666 toneladas. El crecimiento de las ventas se triplicó. De 83,9 millones a 282 millones, con un producto que aumentó un 40% su valor promedio, de 4814 dólares a 6783 dólares.

En un contexto de preocupación por parte de los científicos del INIDEP de atemperar el esfuerzo pesquero que se aplica sobre el recurso y algunos borradores que circulan vía mail entre distintos referentes armatoriales, lo nuevo en zona de pesca es la aparición de algunas marcas al sur de donde opera ahora la flota.

De acuerdo a fuentes consultadas hubo buques que cruzando para operar en el norte de la subzona 14 detectaron marcas importantes en las subáreas 10 y 11, hoy cerradas al igual que la 12. Entre el 44°S y 45°S no hay nada abierto para preservar concentraciones juveniles. Veremos si en las próximas horas esas marcas se consolidan aunque es probable que se dispersen. Se esperaban vientos de hasta 70 km/h en la zona

Pero volvamos a las exportaciones y su viento de cola generado por el langostino. Este crecimiento del langostino entero se respalda exclusivamente por las compras de España, que demandó el triple de productos, de 7 mil a 22 mil toneladas y las ventas crecieron de 33,4 millones de dólares a 147,6 millones.

Los brotes verdes que muestra la pesca de la mano del marisco crecen pese al freno estrepitoso que viene aplicando China, que hasta el año pasado era el principal destino de las exportaciones del sector.

Entre enero y julio China compró 30.860 toneladas de productos por una cifra cercana a los 100 millones de dólares. El año pasado habían sido 82.254 toneladas que habían generado 267 millones de dólares.

La merma principal se advierte en el calamar. Este año compró un 64% menos que el año pasado. Pasó de 60 mil a 23 mil toneladas lo que trajo aparejada una caída en las divisas generadas. De 170 millones de dólares en 2020 bajó a 47,2 millones.

El langostino pudo con todo. Reemplazar la demanda china y sobreponerse a una menor abundancia del calamar que en los primeros 7 meses del año tuvo 20 mil toneladas menos exportadas.

Para colmo ese menor volumen del molusco llegó con una caída de precios en todos los mercados con un promedio de 23,7% de rebaja. Algunos destinos como Singapur, Tailandia y Noruega donde fue mucho del doble SS para carnada, perforo el piso de los 2 mil dólares.

En el illex tuvo un protagonismo central Corea del Sur, el destino que incluso prefirieron las empresas chinas radicadas en suelo argentino para enviar su producción. Las ventas a Corea crecieron un 100%, de 15 mil a 30 mil toneladas.

Además de la voracidad de España por el langostino entero hubo un crecimiento del 15% en la exportación de cola, que pasaron de 30.607 toneladas que generaron 222 millones de dólares el año pasado, a 35080 toneladas por 252 millones entre enero y julio del 2021. El precio promedio de la cola bajó el 1%,.

La mala, siempre hay malas, es que las exportaciones para reproceso de langostino en bloque creció significativamente en algunos países como Tailandia (110%) e Indonesia (90%).  Los envíos a China de este producto se redujeron un 45%, de 9500 a 5200 toneladas a razón de 6600 dólares la tonelada.

El hecho auspicioso fue que Estados Unidos creció en sus compras en un 60% aunque en menor escala. Los envíos pasaron de 1926 toneladas a 3097 toneladas. El precio promedio fue de 9382 dólares la tonelada. El famoso valor agregado que deberían compensarse con una escala de retenciones distinta. Quizás después de muchas promesas lo anuncian en estos días antes de las elecciones.