Se botó el Buque Pesquero Antonia D. en emotiva ceremonia

Sitio de Internet – Pescare – Mar del Plata

Cuando la voz del reconocido locutor Andrés Cosmai dio la bienvenida a los presentes, a las 8:40 de la mañana del lunes 22 de noviembre, se estaba escribiendo una nueva página para la industria naval argentina y para la industria pesquera.

Más allá de la muy buen concurrencia, las redes sociales fueron el vínculo para aquellos que no pudieron concurrir a la botadura nro. 138 del Astillero Naval Federico Contessi y Cía. S.A., una modalidad que es un instrumento más a la hora de otro tipo de presencialidad.

El tradicional astillero entregó el buque pesquero “Antonia D.”, al armador SAFA S.A., propiedad de la familia Di Bona, que en un lugar reservado de la grada, esperaban ansiosos sin ocultar su enorme emoción.

El buque fresquero botado es multipropósito y tendrá como asiento el puerto de Mar del Plata, dedicándose a la pesca de arrastre y media agua de especies variadas a través de la costa bonaerense, haciendo foco en la merluza y el langostino a través de la instalación de sus tangones.

Como suele ocurrir en estos acontecimientos, que afortunadamente han vuelto a la presencialidad, distintas autoridades se hicieron presentes, tal el caso del Prefecto Nacional Naval, Prefecto General Mario Rubén Farinón, primer Prefecto Nacional Naval en concurrir a una botadura en los 60 años de estas realizaciones.

La máxima autoridad marítima compartió el palco de honor con el Director de Policía de Seguridad de la Navegación Prefecto General Ítalo D’Amico y el Jefe de la Prefectura Naval Mar del Plata, Prefecto Mayor José Fernando Dos Santos, conjuntamente con el Intendente Municipal de General Pueyrredón Dr. Guillermo Montenegro, más los concejales Dr. Ariel Ciano y Nicolás Lauría, en representación del CFP estuvo presente Antonio Machioli, mientras que el Área Naval Atlántica estuvo representada por el Capitán de Navío Martín Edgardo Méndez.

El acto contó con la presencia de distintas Cámaras empresarias, representantes sindicales, como así también familias tradicionales de la pesca marplatense que no quisieron estar ausentes en la emotiva celebración.

Luego de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, el presidente del directorio del astillero, Domingo Contessi, fue el primero en dirigir la palabra al público, destacando que “nos entusiasma el acompañamiento que le está dando el gobierno nacional a la Industria Naval Argentina mediante medidas concretas y sumamente necesarias como son las restricciones a la importación de buques usados y la reciente línea de financiamiento del Banco Nación que esperamos sirva para destrabar órdenes de construcción en astilleros que aún tienen su capacidad ociosa y acelerar la renovación de la flota. La industria naval es un ejemplo de superación de la grieta, donde medidas complementadas y profundizadas por dos gobiernos distintos se mantuvieron para lograr un proceso virtuoso que está a la vista. Estas son las políticas de Estado que necesitan una continuidad en el tiempo, porque son frutos también se recogen en el largo plazo”.

Emotivo fue también el momento en que Domingo Contessi agradeció la confianza de parte del armador Carlos Di Bona y de su familia, que una vez más eligieron el astillero marplatense para renovar su flota como lo han hecho en otras ocasiones tanto para construir como para transformar embarcaciones como el caso del “Don Vicente”, “Don Vicente II”, “Sueño Real” y “Portobelo I”.

Una vez finalizado el discurso de Contessi, el Intendente Montenegro se refirió a los presentes y a quienes siguieron la transmisión en vivo donde se manifestó emocionado resaltando el esfuerzo de la familia Di Bona, destacando el trabajo realizado de parte de cada uno de los trabajadores que formaron parte de la construcción.

Acto seguido, el Obispo de la Diócesis de Mar del Plata, Monseñor Gabriel Mestre bendijo la embarcación, mientras que la madrina de la embarcación Antonia María Demetrio, recibió de parte del último trabajador que ingresó al astillero, Bruno Costilla, la medalla recordatoria.

El Capitán de la embarcación, Leandro Daniel Iácono, recibió de manos de los inspectores de la PNA el pabellón Nacional. Iácono, que vivió en el último tiempo una historia muy particular, ya que permaneció internado durante 60 días a raíz de haber contraído Covid-19 y estar 40 días inconsciente.

La botella se estrelló sobre el casco del “Antonia D.” para comenzar una nueva historia. Historias que deseamos  se repitan convenientemente y que el esfuerzo de los armadores siga dando provecho para todos. La industria pesquera continúa en alza, la cadena productiva sigue sosteniendo eslabón a eslabón algo que dignifica y gratifica: el trabajo realizado con manos argentinas.

Por Gustavo Seira