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Mientras que Caleta Paula vive una intensa actividad como producto del ingreso de buques fresqueros de altura y de la flota amarilla que operan sobre la merluza hubbsi en el golfo San Jorge, el puerto deseadense nos ofrece una dolorosa postal de buques parados que ya comenzó a afectar fuertemente a los trabajadores.
Después del veranito que hace una semana nos regaló el congelador merlucero Géminis del Grupo Iberconsa; el último buque que ingresó fue el Argenova XXI que opera sobre la merluza negra, su arribo se produjo el lunes con 180 toneladas de materia prima, pero de momento en el movimiento portuario no figuran nuevos pedidos de giro.
“Hasta ahora las empresas confirmaron que un 80 por ciento de la flota saldrá a la pesca de langostino al norte, pero hay que esperar a los primeros días de abril para que los buques comiencen su alistamiento”, señaló a Mar&Pesca el delegado del SOMU Puerto Deseado Gustavo Barriga al confirmar que la actividad en la estación marítima es prácticamente nula.
Como contrapartida de lo que sucede en el puerto las dos plantas pesqueras que se dedican al procesamiento de merluza fresca en la localidad no dan abasto. “Estamos tapados de merluza, se está trabajando muy bien por suerte, todos los días están llegando los camiones con materia prima desde el puerto de Caleta Paula y eso ayuda que las plantas se mantengan operativas”, apuntaron desde Pespasa al graficar la buena situación que se vive a raiz de la gran abundancia de merluza.