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Luego de la reunión que mantuvieron semanas atrás distintos sectores de la pesca, volvieron a juntarse para delinear un plan de trabajo para dar a conocer cuáles son los puntos de la Ley Ómnibus que afectan y amenazan a todos los trabajadores de todos los ámbitos de la actividad.
Esta vez la reunión se llevó a cabo en el Centro de Operaciones y Monitoreo de la Municipalidad de General Pueyrredón, donde fueron recibidos por el intendente Guillermo Montenegro.
El portavoz del SiMaPe expresó que los gremios rechazan de plano todo lo relativo a la pesca incluído en la ley Ómnibus que se está tratando en las Comisiones del Congreso, ya que existe el Régimen Federal Pesquero que tiene vigencia desde hace 25 años, lo que regula de buena manera a la actividad, por lo que es innecesario realizar modificaciones de algo que funciona bien.
También dejaron en claro que desde la anterior reunión no se ha modificado nada en el proyecto, ni se han comprometido a extraer del articulado lo referido a la pesca, sino todo lo contrario, se hizo la reunión con el ministro Francos, adonde fue el gobernador de Chubut y el intendente marplatense, pero escucharon los reclamos y no se hizo ninguna modificación ni se asumió compromiso firme alguno.
Pasan los días y la intención de las cámaras, gremios y trabajadores pesqueros es poner en conocimiento los graves perjuicios económicos , laborales, y sobre todo en recursos naturales del país, si esta ley se aprueba como es lo procura el gobierno de Milei.
En lo que respecta al texto de la ley , lo más evidente y preocupante es la palabra «licitación», sea nacional o internacional, que pondría los pequeños y medianos empresarios queden afuera de la cuota y del permiso de pesca y que extranjeros se lleven los recursos nuestros y no generen un solo puesto de trabajo en nuestro país.
También los gremios dejaron en claro que la ley surge de un improvisación y un desconocimiento total de la actividad. (Esta redacción duda de esta afirmación, parece muy dirigida) .
Los concurrentes se fueron de la reunión con el compromiso de Montenegro de arbitrar los medios para realizar otra reunión con el ministro Francos (… seguramente más de lo mismo?) y también de convocar a los diputados de su espacio político (PRO) de que se «empapen» de conocimiento sobre la problemática y la afectación de todos los derechos que esta ley traería para Mar del Plata en particular dado que más del 35% del PBI proviene de este sector en la ciudad. Finalizaron .
Una «mesa de trabajo» con gusto a poco al ver lo que se llegó a concluír, si no se realizan acciones concretas, solo imágenes con resultados espasmódicos de funcionarios que se suben a la problemática para no quedar afuera de la foto, pero sin ningún compromiso explícito para lograr revertir un articulado de una ley que de aprobarse, sería la bandera de remate de una actividad que siempre fue insignia de nuestra ciudad y que se realiza con el esfuerzo denodado y anónimo de miles de trabajadores.