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Julián Suárez se alejó del cargo luego de haberse mantenido en el puesto desde la gestión anterior. Cuáles fueron sus razones.
El director de Control y Fiscalización Pesquera de la Nación, Julián Suárez, presentó su renuncia este martes al cargo que ejercía desde el año 2020. El hecho sucedió en el marco de un conflicto con un buque extranjero.
“Me dirijo a usted con el fin de presentar mi renuncia indeclinable a partir del día de la fecha, siendo este el último día trabajado, en el cargo de Director Nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera dependiente de la Subsecretaría de pesca y Agricultura de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía, para la que fuera designado mediante Decisión Administrativa Nº1893/2020 de fecha 19 de octubre del 2020. Finalmente, extiendo los mejores deseos para el futuro de las y los trabajadores de la gestión y para el sector pesquero en su totalidad”, expresó en la comunicación oficial.
Suárez presentó su renuncia indeclinable luego de que se desatara un conflicto por la orden de regreso al puerto argentino del buque Tai An. La embarcación había sido advertida por pescar merluza negra, que es una especie protegida y de gran valor.
Las empresas Argenova, Estremar y Pesantar ya habían denunciado a dicha embarcación, y el mismo funcionario se enfrentó a Cancillería al intentar hacerlo volver al puerto, en contra de las órdenes recibidas.
Suárez había sido designado en 2020 y había mantenido su cargo en la gestión actual, luego de haber pasado por el gobierno de Alberto Fernández. Según trascendió, el subsecretario de Pesca del gobierno de Javier Milei, Juan Antonio López Cazorla, le había solicitado que se quedara al menos 180 días más en el cargo, para poder mantener el diálogo con los diferentes sectores portuarios con los que ya mantenía relación.