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“Las bases se están moviendo”, confirman varias fuentes a PARTE DE PESCA al dar cuenta que hay voluntad en el grueso de la marinería de salir a pescar cuanto antes, teniendo en cuenta que la mayoría están parados desde el mes de febrero. Son varias las empresas armadoras que han sondeado a sus tripulaciones y recibieron como respuesta que están dispuestos a ir a la prospección e iniciar la temporada de langostino en aguas de Chubut.
Está claro que el SICONARA y Capitanes están muy cerca de cerrar un acuerdo, aceptarían el ofrecimiento del sector empresario de fijar el valor del kilo de langostino en mil dos cientos pesos, y que las diferencias que surgieran en las liquidaciones de inicio de año sobre el acuerdo de octubre de 2023, interpretan que se podría reclamar por la vía judicial, sin quedarse parados esta zafra.
Dentro del SOMU hay diferentes agrupaciones que toman distancia de la conducción de la delegación Rawson y la forma en que han manejado la situación que cumple 10 meses de conflicto.
SITUACIONES DIFERENTES
Diferencian claramente que la situación no es igual para todas las empresas. Hay armadoras independientes que liquidaron desde enero a 900 pesos el kilo de langostino, por lo tanto, no tienen ‘deuda’ que reclamar y aceptarían hacer la temporada por 1.200 pesos para liquidar las producciones; valor que les permitiría en los meses pico como diciembre y enero tener remuneraciones mensuales del orden de los $20.000.000 (veinte millones de pesos).
En tanto, las empresas enroladas en la cámara de la flota amarilla mantienen la disputa con el SOMU sobre cómo se liquidaron esos meses, en base a la interpretación del acuerdo de octubre de 2023; esas armadoras lo hicieron a razón de 700 pesos y ahora ofrecen un bono extraordinario para compensar la diferencia.
En rigor, habría voluntad mayoritaria en la marinería en salir a pescar, no perder la temporada y encausar el conflicto, mientras que hay un ‘núcleo duro’ en la conducción del SOMU que no tienen intención de llegar a un acuerdo y dicen a los suyos que si el valor no es $1.500 que Rawson se prepare a no tener temporada.
TRABAJADORES DEL STIA EN ALERTA
Mientras la dirigencia del Sindicato de la Alimentación no ha pedido por el inicio de la zafra, de la cual dependen miles de sus afiliados, son los propios trabajadores del STIA los que han comenzado a reclamar por trabajo. Eso, piden trabajar. Es un sector que gana diez veces menos que un marinero de Rawson y no quieren ser convidados de piedra porque en la cadena productiva paralizada son de los más afectados.
Ante el silencio de sus dirigentes, los trabajadores del STIA se manifiestan en redes sociales y sin eufemismos, en los grupos de trabajadores de plantas pesqueras, donde muestran con claridad la intención de la mayoría de preservar las fuentes laborales y que se inicie la zafra para ganarse su sustento.
EMPRESAS LISTAS PARA IR A PROSPECTAR
Con este escenario, la semana próxima será clave, la Secretaría de Trabajo citará a audiencia y quedará al desnudo qué sindicatos firman el acuerdo y cuál se empecina en que no haya temporada.
Hay empresas armadoras, independientes, que están listas para ir a la prospección y dar inicio a la temporada apenas arranque noviembre, y no como sugiere el SOMU que debe empezar el diciembre. Son varios los dueños de barcos que le transmitieron a sus tripulaciones que no comenzarán a pescar en diciembre, ya que, con solo ese mes, deberán pagar aguilandos al 50% de ese mes en que se abonarán salarios de 20 millones de pesos para un marinero, cifras que se deben multiplicar para maquinistas y capitanes.
En este marco, hay empresas que ya le solicitaron al Gobierno de Chubut que oficialice la convocatoria a prospección para el viernes 25 de octubre, para que quién tenga armada tripulaciones puedan salir a hacer el relevamiento. La idea es acelerar el proceso de salida del conflicto y no quedar todo el sector en pleno atado a los caprichos de dos dirigentes sindicales que hace bastantes años no suben a un barco a la pesca.