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Puerto Madryn volvió a ser epicentro de manifestaciones con la pesca como foco de conflictividad y este martes continuarán las protestas de los marineros que piden iniciar la temporada de pesca de langostino en aguas nacionales, mientras rechazan una rebaja salarial, como proponen las empresas.
La protesta está fraccionada en función de las diferencias internas dentro del SOMU y claramente cruzada por el proceso electoral de renovación de autoridades sindicales. El oficialismo que tiene a Raúl Durdos como referente copó el muelle Almirante Storni y desde allí se manifestaron en el acceso al puerto y quema de cubiertas sobre Ruta 1. En algún momento del día se produjo una interrupción total del tránsito, pero ante la intervención del Ministro de Seguridad, Héctor Iturrioz, los manifestantes accedieron a liberar la arteria y realizar cortes intermitentes, dejando que circulen los vehículos.
A varios kilómetros de allí, en el acceso a la ciudad por Ruta Nacional 3, otro sector de afiliados al SOMU, pero disidentes de la conducción, también protestaron, pero en todo momento buscaron diferenciarse de quienes hoy tienen las riendas del gremio. Hubo piquete y cortes esporádicos al tránsito. La Gendarmería Nacional estuvo apostada en las inmediaciones corroborando que se dejara transitar con frecuencia; allí los cortes se levantaron por la tarde cuando cayó el sol, aunque prometieron continuar hoy con esa misma modalidad.
FALLIDA INTERVENCIÓN PROVINCIAL
El Gobierno de Chubut intentó sin éxito contener la protesta orquestando una reunión de urgencia dos horas antes de la concentración prevista por los gremios. Se llamó a una reunión sin tener ‘tanteado’ el escenario, sin una propuesta que pudiera satisfacer las demandas, y terminó en fracaso apenas comenzada.
Se trató de otra fallida intervención del gobierno provincial en el conflicto pesquero. Hace 15 días, mal asesorado, el gobernador Ignacio Torres se embarcó junto al SOMU en ir a pedir al Consejo Federal Pesquero una ‘inmediata’ prospección, sin haber hecho la mínima consulta a las empresas; el resultado fue peor que el esperado: no se inscribió ni un solo barco.
Errores propios no forzados, que han dejado expuesto al Gobernador, ante la falta de pericia de sus funcionarios para ‘gestionar’ el conflicto de otra manera.
ARBELETCHE REVOLEA CULPAS
Por su parte, el secretario de Pesca de Chubut, Andrés Arbeletche, volvió a exhibir contradicciones e inconsistencias en su relato. El mes pasado, el funcionario recomendaba a las partes “ceder un poco para que no se pierda la temporada”. Y aconsejaba al SOMU y a las cámaras empresarias que cada una resigne alguna posición. “El conflicto es de difícil resolución si ambas partes se mantienen firmes sin ceder nada”, decía en mayo.
En junio, mutó a otra postura: “Los trabajadores no van a ser la variable de ajuste y Nación es la única que tiene las herramientas para destrabar el conflicto”. Un discurso en inequívoca ‘sintonía’ con la dirigencia sindical del SOMU, lo cual no pasó para nada desadvertido desde el sector empresarial.
Andrés Arbeletche, Secretario de Pesca de Chubut (foto crédito: Redes al Mar)
Arbeletche, desde el muelle Storni, ensayó un discurso culpando al gobierno nacional de Javier Milei de no dar respuestas que extingan el conflicto pesquero.
“El Estado Nacional tiene que aplicar las herramientas que tiene, que es reducir las retenciones, reducir el derecho único de extracción (DUE) y evaluar la posibilidad justamente de quitar o reducir el impuesto a las ganancias a los trabajadores”, dijo el funcionario de Torres sin ponerse colorado. Resulta que el fuerte incremento del DUE fue aprobado en diciembre de 2024 con el voto favorable de Chubut, siendo él quien levantó la mano en el Consejo Federal Pesquero. Al tiempo que la recomendación del Secretario de Pesca al equipo económico de Luis Caputo para que le quite el pago de Ganancias a uno de los sectores mejores remunerados del país, no parece que pueda tener eco favorable en el gobierno libertario.
CUMBRE CON FRANCOS
En tanto, el mandatario chubutense Ignacio Torres gestionaba en Buenos Aires una reunión que incluya a varios gobernadores que también tienen en sus provincias los efectos del conflicto langostinero, entre ellos, Axel Kicillof y Claudio Vidal, para que en forma conjunta transmitan al gobierno nacional la gravedad de la crisis pesquera y sus efectos en las economías locales, pero también la pérdida de ingreso de divisas si se extiende en el tiempo.
El encuentro podría concretarse en las próximas horas, aunque no está confirmado y podría recibirlos el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, pero difícilmente de esa reunión pueda surgir una salida inmediata del conflicto.
El eje central de la problemática es la actual estructura de costos de producción, por lo que, hasta tanto se encuentre una alternativa a ese punto, los barcos seguirán amarrados en los puertos.